El cambio en
tiempos post-electorales.
Después del Domingo 1º de Julio, parece
ser que México no volvió a ser el mismo. Claro que no es el mismo después de
cada día, verdad, pero ahora tuvo un cambio drástico. Los mexicanos salimos a
las casillas a votar y elegir a nuestro futuro presidente. Advertidos ya
estábamos porque según las estadísticas el 70% de nosotros estaría inconforme
al día siguiente. Y así sucedió…:’( Pero independientemente de quien ocupe la
silla presidencial dentro de los próximos meses estaremos experimentando
cambios sociales importantes. Por lo que sería bueno prepararnos para los
cambios venideros.
Todos los cambios generan una reacción,
eso es inevitable. El cambio en sí, es inevitable también. Somos seres humanos
y como tales tendemos a reaccionar a los cambios de diferentes maneras. Habrá quien se enoje,
quien se entristezca, quien se sienta frustrado o quien haga como que no pasa
nada(¡negación! Es lo más peligroso), cada uno de nosotros reaccionamos de
diferente manera.
Para mitigar un poco el sentimiento que
genera el cambio detengámonos a pensar que sentimiento nos genera. ¿Es enojo, felicidad,
(sí, felicidad, porque también hay quien está feliz con este cambio), tristeza,
miedo, angustia, preocupación,
indiferencia, incertidumbre, etc.? Cuando tenemos ubicado el sentimiento es más
fácil poder manejarlo.
Generalmente en una situación de cambio
le tenemos miedo a lo desconocido y a las cosas que serán diferentes y que tal
vez se salgan de nuestro control. Pero pensemos que el cambio existe en
nuestras vidas desde siempre, lo hemos manejado toda la vida, como el sexenio
pasado, por ejemplo, el cambio de trabajo, el cambio de escuela, el cambio de
casa, el cambio de pareja, etc. Todos hemos pasado por alguno de estos cambios
y hemos sobrevivido. ¡¡Fiu!!
Ahora los vemos como experiencias de vida
solamente pero en su momento fueron de gran importancia para nuestro
crecimiento emocional. En su momento los sufrimos igual como sufrimos este
cambio. Pensemos en como enfrentamos todos esos cambios. Habremos huido, lo
habremos negado o en el mejor de los casos lo habremos enfrentado y habremos aprendido
de la situación.
Muchos dirán: pero este cambio es diferente,
en este cambio yo no puedo manejar las variables, lo que pase no depende de mí.
Y gran parte de esta afirmación es cierta y parte no. Porque siempre hay cosas
que nosotros podemos hacer y decidir. Como decidir de que manera afrontaremos
la nueva situación, si haremos lo mismo que siempre o intentaremos algo
distinto. Eso sí lo puedes decidir.
Hay una frase que alguna vez leí y que lo
resume todo y que a mí me gusta.
“Change is not the enemy, fear is.” “El cambio no es el enemigo, el miedo si
lo es.”
Leslie.